El poder

Viendo las declaraciones que hizo Ábalos sobre la derrota del PSOE, me ha venido una idea a la cabeza y voy a tratar de explicarla.

Al poder no le gustó que en 2016 Pedro Sánchez intentara negociar en con el partido Podemos. Y ya se encargó Ábalos de sacar a Pedro, crear una gestora y obligar a todos los diputados del PSOE a abstenerse para que gobernara Rajoy (PP), la derecha.

Al poder tampoco le gustó que Pedro Sánchez, después de resurgir como el ave Fénix de entre las cenizas, ganara las primarias a Susana Díaz en el PSOE. Pero aún así, permitió la moción de censura de 2018 creyendo que el PSOE ganaría las elecciones con holgada mayoría. Después de la segunda convocatoria y subiendo (demasiado ya) la extrema derecha, no tuvo más remedio y a regañadientes que permitir la coalición con UP.

En 2015 llevaron a Ciudadanos a nivel estatal, pero no les funcionó. Luego crearon a Vox, siguiendo el libro de estilo de Steve Bannon, y sí les funcionó. Demasiado bien incluso. Tanto, que tuvieron que acceptar la coalición de PSOE con UP.

Pero al poder se le acabó la paciencia. Y escuchando a Ábalos lo he visto claro: ¿quién en su sano juicio dejaría a Gabilondo como candidato de su partido a unas elecciones? Solo alguien que quiere que ese partido no gane. Y no solo eso, que caiga lo máximo posible. Y es justamente lo que ha ocurrido. Ahora fingen que fue un error y tal, pero a estos niveles lo veo bastante difícil, pues todo el mundo se daba cuenta de lo que iba a pasar por muy poco que se supiera de política. El PSOE dejó a Gabilondo como candidato a la CdM porque realmente no quería que ganara. Hasta Más País, el partido que el poder ve «con buenos ojos» (hay que ver cómo cuidan a sus candidatos en los medios), casi le ha hecho el sorpasso. Pero eso no importa, porque el fin último es que el poder siga ahí, con el control del país y la economía, y para ello es necesario que regrese el PP. Y de paso acabar con Pablo Iglesias.

El poder en España tiene que acabar de hacer las reformas que empezaron en 2010 cuando desde Alemania llamaron a Zapatero para que cambiara la constitución y así tuviera prioridad el pago de los intereses de la deuda sobre cualquier política social. Es decir, continuar con la instauración del neoliberalismo en España, que viene a significar aumentar la privatización y la desigualdad del país.

¿Y quién tiene que continuar con este proceso? El PSOE, con la coalición con UP y el pasado de Sánchez, no puede. Tiene que ser el PP, que después de tres años y con el lavado de imagen que ha realizado (personas, imagen, sede, medios, estrategias), ya vuelve a estar en el ring de la política para disputar su siguiente asalto.

¿Y cómo se soluciona esto por la vía más rápida y «legal» posible? Fácil. Con la creación del partido Vox y el uso del manual de Steve Bannon. Ahí se explica cómo usar los medios y redes sociales para acabar con adversarios políticos, que es lo que han estado haciendo durante los dos últimos años. Ya venían haciéndolo con UP desde hace años, pero últimamente se han sofisticado, y mucho.

El acoso y derribo realizado sobre las personas de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias ha sido brutal, sobre todo a este último. La impersonalización, deshumanización, el insulto y la amenzada ha culminado en la campaña política de estas elecciones del 4-M de 2021 en la Comunidad de Madrid (CdM). Nunca había visto que absolutamente todos los medios importantes del país realizaran esta labor tan bien. Ha aprendido mucho el poder en los últimos 7 años. Nunca le perdonarán a Pablo Iglesias el troleo que realizó en los medios para llegar hasta donde llegó.

Y al poder, este 4-M le ha salido todo bien. El PSOE, y toda la izquierda han perdido las elecciones de la CdM. Más País tendrá más voz, lo que hará que cada vez UP tenga menos en todos los medios. Eso tampoco era difícil, pues ya era casi imposible ver a UP en ningún medio y menos hablando, puesto que el bloqueo informativo de la formación política era casi total. Todo lo contrario que a Más País, Ciudadanos y Vox (sobre todo a este último). Y para triunfo total, Pablo Iglesias abandona la política. ¿Se puede pedir más?

Hemos visto estos últimos años el poder que tienen los medios. Le llaman el cuarto poder, por algo será. El poder no los dominaba completamente cuando fue troleado en 2014, pero a día de hoy hemos de reconocer que ya se han graduado con matrícula de honor.

¡Amigos, es el poder! ™